Hace unos días me encontré con una de las participantes en el curso de Visual Thinking: Herramientas para el trabajo con equipos que Muxote Potolo Bat y Emana estamos ofreciendo. De esa conversación, me quedo con uno de los regalos que me brindó, sin ella saberlo: “He encontrado un mejor lugar desde donde poder conversar, aportar y conectar más y mejor con mis clientes… y además, ando utilizándolo también como ejercicio para conectarme conmigo misma”.
Y cuando la escuchaba (además de sentir la alegría de saber que la propuesta que ofrezco funciona y tiene sentido) la idea de conexión, de conexión a tres niveles, personal, de equipo y con el proceso, tomó forma y se dibujó con nitidez.
El Lenguaje Visual (nos) conecta
1.- Me conecta. Tiene la virtualidad de dialogar de manera natural desde aquella inocencia y naturalidad que algún día, por algún motivo, dejé de valorar. Sin ser exclusivo del Lenguaje Visual, permite, de manera directa, casi sin esfuerzo, un diálogo interno “original”. Deshaciendo barreras y máscaras que nos conectan con nuestro ser más auténtico.
2.- Conecta de manera automática nuestro hemisferio izquierdo (lógico, racional, estructurado) con nuestro hemisferio derecho, más loco, más creativo, más ambiguo, más rompedor. Y de ahí, es mucho más fácil la construcción colectiva, aunando con criterios de eficiencia y novedad.
3.- El #VisualThinking conecta las ideas, las voces y las miradas de un equipo.Conecta los puntos de encuentro. Los visualiza y nos permite generar las conexiones necesarias. Las probables. Y también las improbables. Nos permite explorar(nos). Y reconocer(nos).
4.- El Lenguaje Visual nos ayuda a visualizar el lugar desde donde estamos conversando. Colocarlo. Dibujarlo. Para desde ahí poder vislumbrar otros lugares posibles, comunes. Dando lugar, visibilizando el lugar que ocupa cada quien (cercanía y lejanía, tamaño, nitidez), y abriéndose al espacio de lo común.
5.- El lenguaje Visual (nos) conecta con la historia con el camino que nos trajo hasta aquí (conectando el papel de cada uno/a de nosotros/as en esa narrativa (1) . Conecta ese tiempo pasado con el presente. Con este Hoy. Con esa realidad presente que ese equipo comparte en ese precio instante. Ese “aquí» y ese «ahora”. Ese nosotros/as. Destila y “captura” ese momento único. Que reconoce, que honra el camino y que es capaz de vislumbrar, con trazos sencillos, con líneas gruesas (y matices concretos) el futuro que está llegando.
6.- Una de las enormes potencialidades que ofrece el Lenguaje Visual en el trabajo con equipos (y con el trabajo Intrapersonal) es que nos permite visualizar y darle su lugar al silencio. El que calla no otorga. El que calla, calla. Y el silencio es un lugar también que expresa, que ofrece información, que nos coloca (al ejercer el silencio o por escuchar ese silencio) . Poder darle su “lugar” al silencio. Mirarlo. Y poder preguntarnos sobre lo que hay detrás de ese silencio, lo que busca, con lo que está contribuyendo…. Aporta matiz y textura a la lectura de ese equipo, y de su contribución al proceso. Conectar lo que se dice, con lo que no se dice. Lo que está, lo que aparece con lo que está pero no aparece. Pero ambas, se visualizan. En el diálogo entre el fono y la forma. Entre el espacio lleno y el espacio vacío.
El Lenguaje Visual traza un camino hacia nosotros/as mismos (IN). Hacia nuestro interior. Ofreciendo la posibilidad de conectar con nuestro niño/niña interior. Ofreciéndonos un encuentro con ese lugar, que a ratos, parecíamos tener olvidado.
Y desde ahí, abiertos a nuestra fragilidad, mostrando en cada trazo, cada dibujo un pedacito de nosotros/as, la conexión con las personas, nuestros equipos (OUT) se teje con trazos más sólidos, o al menos más auténticos.
Eso nos permite una interacción diferente. Llamémosle nueva. Donde podemos conversar desde otros lugares, con mayor horizontalidad. Ofreciendo la posibilidad, para dibujar las conexiones entre las diferentes ideas que brotan en el espacio.
Y de ahí, conectar los puntos del camino. El pasado, lo que nos trajo hasta aquí. Hasta este aquí y este ahora en el que Somos y Hacemos. Lanzando trazos hacia ese futuro que emerge. Líneas que nos permitirán seguir avanzando. En un camino compartido (conversado, compartido y dibujado).
El Visual Thinking, como Lenguaje, es un poderoso conector. Que “une los puntos” de nuestras propias ideas, proyectos y retos. Que vislumbra secuencia y camino para conectar con nuestros equipos, nuestras propia identidad individual así como con cada una de las ideas que surgen. Reconociendo ese instante preci(o)so de realidad y trazar (nuevos) procesos y dinámicas que pueden emerger.
Por eso, la pregunta no es ¿pero y si no sé dibujar? La pregunta es… ¿quiero conectar más y mejor con lo que soy? ¿Con lo que somos como equipo? ¿Conectar desde los que somos como equipo, con lo que hacemos juntos/as? ¿Conectar el presente (este hoy, este aquí y este ahora) con el futuro que ya está llegando?
(1) Storytelling, desde el #LenguajeVisual se denomina a la secuencia de dibujos y palabras que construye un relato o explica la secuencia de un asunto o situación.
Nos vemos en mayo en Barcelona y en octubre en Bilbao. ¡Hasta pronto!
0 comentarios